10 claves para mejorar la eficiencia energética en los edificios

25 de abril, 2016

Los edificios y viviendas son auténticos devoradores de energía. De hecho, según datos del Ministerio de Fomento, se estima que el sector residencial utiliza el 40% de la energía final de la Unión Europea. Por lo tanto, también pueden ser una importante fuente de ahorro si se promueven una serie de medidas dirigidas a disminuir la demanda energética y a optimizar el consumo mediante la instalación de sistemas de producción de calefacción, climatización y ACS renovables.

Son diez las medidas clave que permiten incrementar la eficiencia energética de los edificios, lo que reporta importantes beneficios para el medio ambiente y también en términos económicos, según la propuesta presentada por LG durante la última edición de Efisur, Primer Encuentro de Ahorro Energético y Construcción Sostenible.

Rehabilitación de carpinterías.

Los puntos más vulnerables en el cerramiento de un edificio son las ventanas. Por ello, es esencial que tanto la carpintería como los vidrios sean los adecuados para favorecer el aislamiento térmico y evitar pérdidas de frio o calor. Medidas con un bajo coste, como remplazar cristales simples por dobles, pueden llegar a generar un ahorro de la demanda de energía cercano al 8%. La colocación de persianas o estores para la protección solar en épocas de calor o favorecer la luz natural en temporadas de frio, son otras de las actuaciones que fomentan el ahorro de energía.

Rehabilitación de cubiertas.

Una cubierta en mal estado puede ser una importante vía de escape de energía. Por el contrario, su impermeabilización y aislamiento térmico reporta importantes ahorros en términos de eficiencia. Se estima que adoptar medidas de este tipo en un edificio de siete plantas puede llegar a reducir la demanda energética en un 4%.

Rehabilitación de fachadas.

El estado general de la fachada es clave a la hora de valorar la eficiencia energética de los edificios. Al igual que en el caso de las ventanas y las cubiertas, es fundamental el aislamiento térmico de la cara exterior para lo que existen múltiples sistemas en función de las características de cada edificio. En algunos casos, incluso, sólo será necesario reformar aquellas fachadas más expuestas al frio o al viento. Esta medida puede llegar a ahorrar un 15% de la energía consumida.

Rehabilitación de patios interiores.

Los patios interiores, aunque están más resguardados que las fachadas, son elementos del edificio que están en contacto con el exterior y, por tanto, precisan de las medidas adecuadas de aislamiento frente a las temperaturas y la humedad. Además, una adecuada planificación de la rehabilitación del patio puede reducir las necesidades de luz artificial en las viviendas, un aspecto fundamental desde el punto de vista energético si se tiene en cuenta que el gasto en luz supone entre el 5 y el 10% del gasto total de energía de la vivienda.

Mantenimiento de edificios.

El mantenimiento preventivo de las instalaciones supone un factor clave también en el ahorro de energía. Es fundamental adelantarse a los problemas que puedan surgir y vulneren las condiciones de aislamiento térmico o iluminación del edificio. Las labores de mantenimiento deben ir dirigidas a lograr el máximo ahorro y disminuir el impacto ambiental.

Renovación del ascensor.

Un ascensor genera entre el 5 y el 10 % del gasto energético de las zonas comunes. Del total del consumo generado, el 75% se destina a la iluminación del ascensor y el resto al funcionamiento del sistema de tracción. Renovar un modelo básico de ascensor por uno de accionamiento eléctrico con velocidad variable puede producir un ahorro de energía cercano al 30%.

Sustitución de la iluminación.

La planificación de los puntos de luz y la sustitución de lámparas poco eficientes, como las incandescentes o las halógenas, por otras de bajo consumo es una de las prácticas menos costosas y más eficaces para el ahorro de energía. Los sistemas LED permiten un ahorro de entre un 60 y un 80% frente a otros modos de iluminación.

Sustitución del sistema de aire acondicionado y calefacción.

La sustitución de los sistemas convencionales de calefacción o aire acondicionado por otras propuestas renovables supone un importante salto en materia de ahorro energético. Existen en el mercado opciones de climatización ecológica que reducen de manera considerable las emisiones de CO2 provenientes de las calefacciones que funcionan con energías fósiles. Este es el caso de la bomba de calor Therma V de LG, que utiliza una fuente de energía renovable como el aire para adaptarse a las necesidades de climatización colectiva e individual. Al combinar la bomba de calor con la tecnología inverter de LG, este sistema permite un mayor ahorro de energía que otros similares. Además, Therma V se puede utilizar con diversas soluciones de calefacción, desde suelo radiante hasta el suministro de agua caliente para múltiples fuentes de calor.

Renovación del sistema de Agua Caliente Sanitaria (ACS).

El reemplazo de calentadores instantáneos de gas y de termos eléctricos para la producción de agua caliente sanitaria por otras soluciones como el sistema Therma V de LG puede llegar a suponer un ahorro en energía muy significativo. La propuesta de LG es 4 veces más eficiente que las instalaciones tradicionales de caldera gracias al sistema de absorción de la energía del ambiente exterior. Therma V puede sustituir completamente el sistema de caldera, proporcionando agua caliente para calefacción y uso doméstico.

Mantenimiento de los sistemas.

Si la renovación de la iluminación y los sistemas de calefacción, aire acondicionado y ACS son pasos fundamentales para lograr la eficiencia energética en un edificio, su mantenimiento no es menos importante. De hecho, el mantenimiento periódico de los equipos, alargar su vida útil, reduce su consumo y, por tanto, los hace más eficientes.

Bomba de calor agua LG Therma V

La bomba de calor THERMA V de LG permite la renovación de los sistemas de calefacción, climatización y ACS convencionales por una propuesta renovable y ecológica cuarto veces más eficiente que los sistemas tradicionales de calefacción.

A través de un único sistema, THERMA V aporta calefacción, agua caliente sanitaria y refrigeración. Además, puede emplearse para diferentes soluciones de calefacción: suelo radiante, radiadores y fancoils y puede ser instalado tanto en obra nueva como en remodelación.

Therma V obtiene un 75% de su energía del aire limpio de la atmósfera y sólo un 25% de la electricidad, es decir, por cada kilowatio de energía entregado al hogar solo una cuarta parte proviene de la red eléctrica, viniendo las otras tres cuartas partes del aire ambiente.

Therma V es considerada como energía renovable y de gran eficiencia según las directrices establecidas por la normativa Europea. Además, la bomba de calor ha sido elegida por Greenpeace en 2011 como el mejor sistema de calefacción en lo que se refiere a eficiencia energética. Esta característica se debe a su funcionamiento que está basado en transportar calor en vez de generarlo.

La bomba de calor de LG es un sistema de climatización fácil, cómodo y fiable. Dispone de distintas funciones adecuadas a cada usuario. A través del mando a distancia el usuario puede seleccionar la temperatura deseada, programarla de forma automática o utilizar el modo de operación según el clima, en el que el establecimiento de temperatura vendrá determinado por la temperatura exterior automáticamente. Gracias a este sistema, se puede mantener una temperatura estable y confortable a pesar de las condiciones climáticas exteriores.

Además, Therma V cuenta con la funcionalidad de operación de emergencia en dos pasos que garantiza una producción de calor más consistente incluso cuando ocurre un error imprevisto, lo que aporta una mayor fiabilidad al sistema de climatización.